La Fiscalía de Roma ha iniciado un procedimiento penal por la muerte en Ibiza de Michelle Noschese, el DJ conocido como Godzi, ocurrida el pasado 19 de julio, y que se investiga ahora como homicidio involuntario.
Según el padre de la víctima, Giuseppe Noschese, la autoridad italiana ha incoado un proceso penal por el delito de homicidio involuntario, tipificado en el artículo 584 del Código Penal, con una pena de prisión de 10 a 18 años. El cuerpo del DJ llegó al aeropuerto romano de Fiumicino el pasado viernes.
La autopsia realizada al DJ italiano apuntaba a que murió debido a la ingesta continuada de sustancias estupefacientes, descartando la presencia de signos de violencia. Sin embargo, la familia Noschese acusa a los agentes de la Guardia Civil de haber contribuido a su muerte.
En la vivienda del fallecido se encontraron diversas cantidades de tusi, cocaína y ketamina, pero no se hallaron signos de violencia que relacionaran la muerte con la actuación de los agentes, según un comunicado de la Guardia Civil.
La reconstrucción de los hechos señala que Noschese habría agredido a su pareja y discutido con otros individuos en el domicilio, lo que llevó a la mujer a huir a una vivienda colindante por miedo a ser herida. Los agentes encontraron al DJ amenazando a un anciano con un cuchillo, quien estaba bajo los efectos de sustancias estupefacientes.
Tras una resistencia violenta por parte de Noschese, los agentes lo redujeron y perdio el conocimiento. A pesar de intentos de reanimación, el DJ falleció. La Guardia Civil aseguró haber garantizado la transparencia del procedimiento y el respeto al marco legal.
En resumen, la muerte de Michelle Noschese está siendo investigada como un posible homicidio involuntario, mientras se esclarecen los eventos que llevaron a su trágico fallecimiento en Ibiza.
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